Nueva York, Nueva York. – La actriz Blake Lively presentó una solicitud ante un tribunal federal para desestimar la demanda de 400 millones de dólares interpuesta en su contra por el actor y director Justin Baldoni, calificándola de “vengativa” y “divagante”. En documentos judiciales presentados el jueves en el Distrito Sur de Nueva York, la estrella de Gossip Girl argumentó que la demanda de Baldoni es un "profundo abuso del proceso legal” y que la ley prohíbe el uso de demandas por difamación como represalia contra personas que han denunciado acoso sexual.
Lively, de 31 años, sostiene que su testimonio está protegido por la ley de California, bajo los privilegios de litigio, informe justo y acoso sexual, lo que impediría que Baldoni, de 41 años, tuviera fundamentos legales para demandarla. Además, criticó la suma millonaria exigida por Baldoni y Wayfarer Studios, señalando que los demandantes no han justificado el monto ni especificado los supuestos daños sufridos. También negó categóricamente haber cometido extorsión, afirmando que las acusaciones en su contra surgen de "expresiones protegidas por la ley”.
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Para quien no lo sepa, en enero, Justin Baldoni presentó una demanda contra Lively, su esposo Ryan Reynolds y su publicista Leslie Sloane, acusándolos de difamación, extorsión, fraude promisorio e invasión de la privacidad con luz falsa. Su abogado, Bryan Freedman, argumentó que las acusaciones de Lively "destruyeron la reputación personal y profesional" de Baldoni y que la intención era "sacarlo del negocio por completo”.
Lively había presentado en diciembre de 2024 una denuncia ante el Departamento de Derechos Civiles de California, alegando que Baldoni le hizo comentarios sexuales inapropiados en el set, se acercó a ella sin su consentimiento mientras amamantaba y habló sobre su adicción pasada a la p*rnografía. También aseguró que el director generó un ambiente laboral hostil para otras mujeres en la producción.
Los abogados de Lively, Mike Gottlieb y Esra Hudson, reafirmaron que la demanda de Baldoni es infundada y que "la ley de California protege a las víctimas que deciden hablar sobre el acoso sexual y las represalias".
El intento de los demandantes de llevar a la Sra. Lively 'hasta el olvido' con una demanda frívola solo ha creado más responsabilidad para ellos", declararon.
Un portavoz de la actriz agregó que Lively "no es la única que ha sido demandada por difamación tras hablar sobre el acoso sexual en el trabajo”, advirtiendo que casos como este buscan silenciar a quienes denuncian conductas inapropiadas en la industria. La última presentación de Lively se produce después de que su esposo, Ryan Reynolds, solicitara a principios de semana ser excluido del caso. Sus abogados argumentaron que las declaraciones de Reynolds sobre Baldoni eran "expresiones de opinión protegidas por la ley".
Sin embargo, el abogado de Baldoni, Bryan Freedman, respondió a la solicitud, asegurando que Reynolds fue "un jugador clave en el plan” y que su intento de minimizar el caso envía "un mensaje claro de que el acoso es aceptable”. El tribunal deberá decidir si desestima la demanda o si el caso continúa en litigio. Mientras tanto, el conflicto entre Lively y Baldoni ha reavivado el debate sobre el uso de demandas legales en casos de acoso sexual en la industria del entretenimiento.
Fuente: Tribuna