Connecticut, Estados Unidos.- Vince McMahon, presidente ejecutivo de la World Wrestling Entertainment (WWE), renunció a su cargo en la empresa TKO, quien es dueña de la empresa de lucha libre estadounidense, luego de que una empleara hiciera graves acusaciones en su contra en una demanda interpuesta en una corte de Connecticut, ciudad donde tiene operaciones la compañía más importante de lucha en los Estados Unidos.
McMahon es acusado, junto a otro exejecutivo de la empresa, de delitos sexuales por parte de Janel Grant, quien formó parte del departamento legal y de talentos de la compañía. Según revela la agencia de noticias AP, el presidente ejecutivo de 78 años y quien por años fue el único dueño, habría obligado a su exempleada a tener relaciones sexuales con el fin de conservar su empleo en la WWE.
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También se le señala ya que habría difundido material pornográfico de ella, incluyendo fotografías y videos. También habría ofrecido los servicios sexuales de la mujer en cuestión a un luchador estelar, según señala la agencia de noticias. A través de un comunicado, McMahon aseguró que trabajaría para limpiar su nombre y negaba todos los señalamientos en su contra alegando que se trataba de "distorsiones negativas de la realidad".
“Defiendo mis declaraciones previas, acerca de que la demanda de la señorita Grant está repleta de mentiras, instancias obscenas fabricadas que jamás ocurrieron y distorsiones vengativas de la realidad. Pretendo defenderme vigorosamente contra estas acusaciones infundadas, y estoy ansioso por limpiar mi nombre”, aseguró el ahora expresidente de la compañía de lucha en su comunicado.
No es la primera vez que McMahon es señalado por acusaciones similares, pues en el 2022 también estuvo en medio de una investigación. Según trascendió en la prensa estadounidense, Vince habría tenido acuerdos con varias mujeres por lo que se implementó un comité de investigación por parte de la compañía, pero en el 2023 retomó su cargo en la nueva junta directiva de TKO.