Beijing, China.- Carlos Alcaraz ganó siete puntos consecutivos en el decisivo desempate para vencer el miércoles 6-7 (6), 6-4, 7-6 (3) al número uno del ranking Jannik Sinner, número uno del mundo, y ganar el Abierto de China, ampliando su reciente dominio sobre su mayor rival, quien enfrenta un caso de dopaje.
Alcaraz, tercero en el ranking, ha ganado sus tres encuentros con Sinner este año, y también ha salido victorioso en las semifinales de Indian Wells y el Abierto de Francia.
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“Él podría haber ganado en dos, yo podría ganar en dos, él podría ganar en tres. Fue un partido muy igualado”, dijo Alcaraz. “Jannik, una vez más, demostró que es el mejor jugador del mundo, al menos para mí. El nivel al que está jugando, es increíble. Es un tenis de muy alta calidad. De tiros, físicamente, mentalmente, es una bestia”.
Alcaraz puso fin a la racha de 15 victorias de Sinner y le negó al italiano tres títulos consecutivos después de los trofeos en Cincinnati y en el Abierto de Estados Unidos.
Falla la estocada final
Alcaraz desperdició una ventaja de 5-2 en el primer set y también permitió que Sinner regresara en el tercero después de liderar 4-2 antes de finalmente superarlo después de también quedarse atrás 3-0 en el desempate del set final.
Alcaraz cambió sus dos zapatos después de ir perdiendo 2-0 en el desempate del tercer set. Luego perdió un punto más antes de iniciar una racha de siete puntos que demostró por qué es una amenaza en cualquier parte de la cancha.
Hubo tiros ganadores de derecha de adentro hacia afuera, incluido uno en su primer punto de partido, un tiro de aproximación de volea difícil y también una dejada.
“No voy a mentir: 3-0 abajo, dos mini-descansos para él, así que no perdí la esperanza, pero pensé: 'Está bien, tengo que dar todo lo que tengo para tratar de darme la oportunidad de estar cerca'”, dijo Alcaraz. “Jugué grandes puntos solo para hacer el 3-3 y después de eso solo pienso en ir a por ello. Si lo pierdo, al menos fui a por ello”.
Acaparan todo
Alcaraz produjo 55 tiros ganadores frente a los 30 de Sinner, pero también tuvo 52 errores no forzados frente a los 31 de su oponente, una señal de sus estilos contrastantes: el juego de ataque de Alcaraz frente al enfoque constante de Sinner.
El partido, que se jugó en condiciones frescas con el techo retráctil abierto, duró 3 horas y 21 minutos para convertirlo en el encuentro más largo en la historia del torneo (desde 2004).
Sinner y Alcaraz han sumado los cuatro títulos de Grand Slam este año entre ellos, divididos en dos partes iguales cada uno: Sinner ganó el Abierto de Australia y el Abierto de Estados Unidos, mientras que Alcaraz ganó el Abierto de Francia y Wimbledon.
Alcaraz mejoró a 6-4 en su carrera contra Sinner después de su décimo encuentro en lo que se ha convertido en la máxima rivalidad del tenis después de los 60 partidos entre Rafael Nadal y Novak Djokovic.
Fuente: Tribuna