Reikiavik, Islandia.- La pandemia por el virus Covid-19 ha destrozado económicamente y en términos de salud pública a muchos países del mundo. Europa ha sido golpeada por el surgimiento de nuevas variantes de coronavirus y ha tenido tres aplastantes olas de la pandemia. Sin embargo, existe un oasis en el continente: Islandia, primer país en librarse del Covid-19.
En toda Europa, Islandia es el único país que tiene de vuelta los restaurantes, centros deportivos, conciertos y bares abiertos sin problemas. En este país solo se registran 20 casos de coronavirus al momento y en total han tenido únicamente 29 muertes por Covid-19 durante la pandemia.
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Thorolfur Gudnason, el epidemiólogo que ha llevado la pandemia en la isla europea, dijo que el secreto para deshacerse del virus está en haber atacado con medidas estrictas desde el día uno del primer caso confirmado.
Su estrategia se concentró en detectar casos que dieran positivo al virus, rastrear a las personas con quienes tuvieron contacto y un aislamiento estricto. Se hizo incluso un hospital de aislamiento por Covid-19.
Esto lo siguieron desde la primer ola de Covid-19 en 2020. Aún así, lograron erradicar satisfactoriamente un posible desborde de casos; para el mes de mayo de ese año, el país ya estaba declarado como libre del virus.
Sin embargo, Islandia fue golpeada por una segunda ola durante el verano, debido a que se presentaron casos positivos traídos por unos turistas. Esta vez fue más agresiva que la primera, pero se lograron endurecer las medidas para controlarla.
Desde julio del 2020, el país hace pruebas de detección de Covid-19 en el aeropuerto, obligatorias para cualquier persona que quiera ingresar a la nación. Asimismo, cada persona que llega a Islandia se somete a un proceso de cuarentena para evitar aún más los riesgos de contagio.
Esto ha resultado fundamental para controlar la pandemia: si bien, la sociedad necesita seguir su dinámica y fue imposible mantener un aislamiento total prolongado, en esta nación pensaron que sería mejor atacar el virus a su ingreso al país.
Justamente con estas estrategias es que Islandia no solo ha logrado deshacerse en lo posible del Covid-19, sino que durante meses ha logrado que la nueva variante británica del virus no ingrese a su territorio.
Tan solo el no tener casos con la nueva variante es un éxito bastante significativo si se considera que toda Europa sufre su tercer ola gracias a esta mutación. Los logros de Islandia podrían ser el ejemplo para varios países europeos.
Fuente: BBC