Heilongjiang, China.- Un trapeador y coraje fungieron como las armas que utilizó una empleada del Gobierno chino para cesar el acoso sexual del que era víctima en su centro de trabajo. Su jefe le envió mensajes de texto lascivos, lo que desencadenó el hartazgo de la afectada.
El ataque fue captado por un video de 42 segundos, en los que la mujer entra a la oficina del sujeto y lo golpea en repetidas ocasiones con un trapeador. La fuerza del impacto provoca también que caigan los objetos que estaban sobre el escritorio del acusado.
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De acuerdo con medios locales, los hechos ocurrieron en la provincia de Heilongjiang y los protagonistas de la grabación responden a los nombres Wang, el hombre, y Zhou, la víctima de conductas impropias.
Mientras era blanco de la ira de la fémina, Wang se limitó a defenderse al decir que el escrito había sido una broma. La grabación tomó fuerza en redes sociales por la respuesta de Zhou.
Previo a esta escena, la trabajadora de la Agencia de Combate a la Pobreza había denunciado a su superior ante la policía, pero cansada de la situación, tomó justicia por su mano. Como resultado, el funcionario perdió su puesto, en tanto que la mujer no recibió sanción alguna.
Fuente: Cultura Colectiva