El pasado miércoles 23 de noviembre se presentó en la Cámara de Diputados el proyecto de dictamen de la reforma electoral, elaborado con base en la propuesta planteada hace ya unos meses por el Presidente López Obrador, y a partir de la cual se ha generado una gran controversia y varias manifestaciones en contra.
Sí bien, este proyecto de reforma electoral no es idéntico a la primera propuesta de reforma constitucional que envió el Ejecutivo, la cúal se discutió en el pleno de la Cámara de Diputados y no alcanzó los votos necesarios para lograr la mayoría calificada que necesitaba como reforma en materia constitucional, sí mantiene algunos de los principales puntos planteados en el proyecto original.
En la reunión ordinaria celebrada, los integrantes de las comisiones correspondientes dieron a conocer el proyecto de poco más de 900 cuartillas, el cúal pretende adicionar, derogar y reformar diversas disposiciones de la Constitución Política en materia electoral. Según lo establecido en las leyes de procedimiento, este documento deberá ser revisado y analizado antes del 28 de noviembre, fecha en la cual se llevará a cabo la votación para su aprobación.
- ¿Qué busca AMLO con esta propuesta de reforma electoral?
Uno de sus principales puntos es continuar con el plan de austeridad que ha defendido durante su mandato. Esta propuesta para reformar la ley electoral busca principalmente abaratar los costos del sistema político mexicano. Según lo presentado, esta reforma representaría un ahorro estimado en 24,000 millones de pesos que se lograrían mediante la implementación de los ajustes en la burocracia electoral y legislativa, así como con la disminución en el presupuesto de los partidos políticos.
La reforma presentada por el Presidente propone reducir el número de legisladores, en el caso del Senado, de 128 senadores a 96. En el caso de la Cámara de Diputados, de 500 a 300. Así mismo se propone desaparecer la figura de los legisladores plurinominales, es decir, aquellos escaños que se reparten con base en el porcentaje de votación que obtuvo cada partido político, quedando solo aquéllos electos por los ciudadanos. Y reducir los escaños en los congresos locales con un mínimo de 15 y máximo de 45. En cuanto a los ayuntamientos el límite sería de nueve legisladores.
- ¿Cuál es la diferencia entre este proyecto de dictamen de la reforma electoral y el original propuesto por el Ejecutivo?
En el proyecto para reformar la ley electoral original presentado por el Ejecutivo discutido hace tan solo un par de semanas en el pleno, se propone modificar los 18 artículos de la Constitución referentes a materia electoral. Esta segunda propuesta, que ha sido conocida como el Plan B de Andrés Manuel, busca reformar las leyes secundarias de dichos artículos, para lo cual no necesita la mayoría absoluta que supone un acuerdo con los partidos opositores.
Algunas de las modificaciones que se llevarían acabo de pasar esta propuesta, serían: regulaciones a las telecomunicación y a la propaganda gubernamental, reducción de gastos a partidos políticos (aproximadamente 11,000 millones de pesos del llamado financiamiento ordinario que se les entrega cada año), aspectos referentes a las presidencias de comisiones al interior del Consejo General del INE, reducción de áreas administrativas y dependencias internas, así como el voto electrónico, entre otras.
- ¿Cual ha sido la discusión en el Senado?
La oposición representada por la unión de los partidos PRI-PAN-PRD argumenta que la reforma electoral de Andrés Manuel es una estrategia para eliminar al Instituto Nacional Electoral, basados en la propuesta de convertir al actual INE en en el Instituto Nacional Electoral y de Consultas.
Al respecto, resaltan algunas de las participaciones de los diputados opositores. Salvador Caro Cabrera, del partido Movimiento Ciudadano, hizo hincapié en que la propuesta electoral busca desaparecer al INE y además, desvirtúa el sistema democrático al limitar la representación popular. Así mismo aseguro que de pasar este dictamen se centralizará los procesos electorales.
La postura del PAN, dada mediante las intervenciones de los diputados Marco Humberto Aguilar y Paulina Rubio Fernández, sostuvo que esta segunda iniciativa seguía proponiendo lo mismo que la primera presentada por el ejecutivo y que dicha iniciativa debilita al INE así como a los partidos políticos.
Por su parte Alejandro Moreno, Presidente del PRI, aseguró que su partido no apoyaría “ninguna reforma que signifique un retroceso a lo que por años la ciudadanía de nuestro país ha construido”.
Así mismo, la postura de los diputados representantes del PRD, afirmó que su grupo parlamentario no votará a favor de ninguna iniciativa que vaya en detrimento de la democracia, y también denunciaron la falta de reuniones, de diálogo, y apertura.
- Dentro de MORENA también hay tensiones
Sí bien, los legisladores de este partido se manifiestan en absoluto favor de la reforma electoral, hay algunos puntos de discrepancia en el partido.
Por un lado el diputado Leonel Godoy Rangel señaló durante la discusión que “el INE no se toca, no se ha querido tocar, se ha querido transformar” y recalcó que “es falso que se quiera desaparecer al INE”. E invitó a la oposición a hacer una propuesta para debatir dentro del plazo establecido.
Por otro lado, el líder de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal, ha hecho algunas declaraciones sobre el procedimiento que ha seguido la iniciativa electoral del presidente, advirtiendo que no es momento oportuno para presentar una reforma electoral, y ha dicho que el Instituto Nacional Electoral ha tenido un desempeño aceptable, por lo que, según el legislador, sí las reformas propuestas no se aprueban, no se pone en riesgo la elección de 2024.