EN TÉRMINOS GENERALES, LOS ANALISTAS que pronosticaron que el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR conservaría la mayoría legislativa y que en todo caso solo perdería la mayoría calificada, tenían razón. Poco a poco la realidad político-electoral después de la jornada del domingo 6 de junio, irá asentándose y la ciudadanía tendrá muy claro cuál es la nueva situación de cada quién.
Acá, en Sonora, nos hemos abstraído en lo que ocurrió en el resto del país, absortos en la repetición y las sorpresas electorales que por segunda vez consecutiva, Morena asestó a una oposición que no acaba de asimilar la tremenda derrota.
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En nuestro estado, las cosas fueron “casi” como en el 2018. Lo de “casi” puede verse desde la perspectiva de que esta vez los ciudadanos no llegaron a ciegas a la jornada electoral.
A mí no me cabe duda que en Cajeme el voto opositor se dispersó. Y los números no dieron para más.
Hubo sorpresas pequeñas y grandes. Verbigracia: el triunfo del guaymense ANTONIO ASTIAZARÁN en la disputa por la alcaldía de Hermosillo.
“Tinto en sangre” pero ganó.
Y pequeños triunfos pero igualmente meritorios, como el de GERARDO MENDÍVIL (El Yayín), sobre GUADALUPE BUJANDA, en Rosario, también en una final de fotografía. Y el triunfo, pequeño pero gigante al mismo tiempo, de SERGE ENRÍQUEZ TOLANO, en la elección por la presidencia municipal de Bácum.
Unos cuantos votos marcaron la diferencia. Decía, pues que más allá de lo que sucedió en Sonora, en términos de país, a AMLO le salieron bien las cosas. No como hace tres años, cuando legislativamente arrasó con todo y pulverizó los contrapesos del poder. Con la nueva realidad, esto ya no podrá hacerlo. Es y no es mucho.
Pero es un paso, pequeño si se quiere, pero un paso en el largo camino de la reconstrucción democrática del país.
Morena pierde varios importantes municipios en el Estado de México y lo mismo ocurre en la Ciudad de México.
Gana varias gubernaturas, le arrebata al PRI cuando menos tres y tal cuatro, a Sonora, Colima, Campeche y Sinaloa.
AMLO tiene motivos para sentirse especialmente congratulado. Ganó la mayoría en el Congreso local de Tamaulipas y los más importantes municipios de ese estado fronterizo.
Tengo, para mí, que el gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, debe estar imaginándose las peores cosas que le pueden pasar a uno.
¡Y como no, caray!
Sin Congreso para los venideros tres años, el desafuero es cuestión de semanas, tal vez meses.
Mire usted: según veo yo las cosas, en volumen, Morena salió ganando: en gubernaturas, en municipios, aunque no los más importantes del país. En Congresos locales. En curules en la Cámara de Diputados, pero perdió la mayoría calificada.
En Sonora, tendrá mayoría en el Congreso. Conserva Cajeme pero pierde Hermosillo. En este punto, no habrá problemas: todo mundo sabe que Toño y ALFONSO DURAZO son cuates. Trabajarán bien.
Bueno, digo yo.
El cajemense ANDRÉS SALAS SÁNCHEZ, sale ganando. Le coordinó la campaña en el sur a Durazo, con quien trabajó cercanamente como director general de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Que no es poca cosa.
¿Por qué ganó Durazo, que no era un mejor candidato que el Borrego Gándara?
Porque ganó el presidente López Obrador y la batalla fue contra AMLO y no contra ADM. Así de sencillo.
La oposición en México debe entender que necesita reorganizarse, a sí misma sin siglas anquilosadas de partidos quemados sino con una cara nueva y con sangre joven. El PRI ya no existe como el partido que ganaba batallas y batallas. Lo que queda es una dispersa estructura que ha perdido el rumbo y su capacidad para ganar triunfos nacionalmente. Ya no hay una jerarquía global que todos obedecían. Lo que hay es una serie de pequeños trozos diseminados por el país. En realidad, eso que llamamos PRI, ya no tiene una jerarquía lineal ni tampoco piramidal. Es posible que en cada estado exista un caudillo o cacique que tenga el control del PRI en su región. Este pequeño liderazgo, no opera para la dirigencia nacional, la que por cierto es solo un chiste.
En suma: el gran elefante que fue el PRI, ya no lo es más.
En el interior del país, nadie hace caso a ALITO MORENO. En la formalidad del papel, sigue siendo el “dirigente nacional”. Pero solo en el papel. De hecho, el PRI volvió a los tiempos en que México cada estado tenía su propio caudillo emanado de la Revolución y naturalmente, también sus propias tropas y su partido político.
Cuando CALLES crea el Partido Nacional Revolucionario, lo hizo para aglutinar a esos pequeños partidos y para acabar con los caudillos.
Después LÁZARO CÁRDENAS le cambió de nombre. Le puso Partido de la Revolución Mexicana, y MIGUEL ALEMÁN lo modernizó: le puso PARTIDO REVOLUCIONARIO INSTITUCIONAL.
Pero todo tiene su ciclo. Nace, crece y muere. El PRI, está agonizando. Pero nadie quiere asumir esta realidad.
La del domingo, no fue una contienda del partido oficial contra varios partidos coaligados. En realidad, ni el PAN ni el PRD, pueden considerarse afortunados de estar vivos. Morir así, es vergonzoso.
Como sea, sigo pensando que mi premonición del otro día, antes de las elecciones, tiene una razón de ser.
Yo creo en los presagios. Algunos buenos. Otros, no.
En todo caso, el tiempo lo dirá. En fin.
DE AQUÍ, DE ALLÁ Y DE MÁS ALLÁ
Y A TODO ESTO, CARO AMIGO, ¿Qué fue lo que a usted le pareció más interesante de todos los locutores y comunicadores que estuvieron narrando la mañana del día de las elecciones?...
Particularmente, a mí me divierten las escenas donde se ve llegar a equis candidato a su casilla para votar… Me gustaron mucho las escenas que le tomaron al presidente AMLO. Me hizo reír que una periodista tan fogueada y por cierto muy admirada por un amigo mío, AZUCENA URIOSTEGUI, se pusiera a cultivar la adoración a la personalidad presidencial…
Mire que contar los pasos que caminó el presidente entre el Palacio Nacional y la casilla, que estaba justamente frente al edificio nacional…
No pude menos que evocar a LUIS ECHEVERRÍA…
Déjeme contarle: por naturaleza, yo suelo ser observador. Hasta una foto vieja me pone a reflexionar… O una vivienda en lo alto de una montaña de cuya rústica chimenea fluye aroma a café y a desayuno recién preparado…
Así, pues, cuando observo una personalidad como la gobernadora CLAUDIA PAVLOVICH, parada en su lugar en la fila para votar, imagino qué estará pensando esa mujer poderosa mientras su nombre es mencionado por todos y todas las miradas se posan en ella… Esa mañana Claudia vistió elegante con un pantalón negro y blusa blanca, sobria, y con su cubrebocas dejaba a la observación sus ojos igualmente dubitativos… Delante de ella, su esposo y compañero SERGIO TORRES…
Como decía RENATO LEDUC, citando a un amigo suyo: la vida riela…
POR LO PRONTO, ME DICEN que desde Etchojoa, mi cuate CHALITO MATUZ envió felicitaciones a SERGE ENRÍQUEZ TOLANO, a quien se le atribuye el triunfo del orgullo…
Es todo.
Le abrazo.
m.rivastribuna@gmail.com