OPINION

Madres

Leviatán

Columna de César TovarCréditos: TRIBUNA
Escrito en OPINIÓN el

A la distancia parecen brazos frágiles, agotados de soportar tanta afrenta, de cargar con responsabilidades titánicas, pero en el acto de enterrar una larga y pesada varilla en una tierra seca y añosa, esos brazos se vuelven duras ramas de un árbol que, pese a todo, aún florece.

 Bajo el sol inclemente, con el mundo viéndolas de reojo, cientos de madres buscan a sus hijos en las entrañas de un país que los consume sin freno, de una nación que no termina de entender la tragedia en la que se convirtió.  

Las Madres Buscadoras ejemplifican ese tormento que para muchas mujeres es México, un país que fabrica hijos en los vientres de sus hijas para luego absorberlos como si se tratasen de un simple número, de un objeto remplazable con facilidad.

 Y no son las únicas.

Ahí están aquellas que tienen que tener dos o tres trabajos para solventar los gastos, carentes de una política social verdadera que les brinde atención, seguridad y viabilidad para sacar adelante a su familia.

O aquellas que cargan a sus hijos pequeños por las calles, piden una moneda y la mayoría de las veces reciben desprecio y desdén, alejadas de todo programa, de toda ayuda, de cualquier tipo de respaldo.

Y el resto, sin importar clases sociales, que vive con el miedo de que algo les pase a sus hijos, que da cuenta cómo la vida que conocíamos no existe más y que la calamidad acecha constante e impune.

Sin duda, se trata de un presente generalizado que no tiene lugar, que carece de toda lógica.

Sólo una madre puede convertir lo terrible en poesía, el trueno en un grito, la desventura en una posibilidad de un mejor mañana. E insistimos en no cuidarlas.

Y si como sociedad no hacemos algo para revertir, estaremos saboteando nuestro propio futuro.

Porque sin ellas, sin las madres, todo carece de sentido.

@cmtovar